La pretemporada del Barcelona regresó a la normalidad, al menos en lo que se refiere a resultados, tras el sapo que todos tuvieron que tragarse hace tres días en Múnich. Ante un rival amable y paupérrimo, como deben de ser los rivales a estas alturas de curso, el Barça liquidó el trámite ante el esforzado pero pésimo Valerenga por 0-7 dando la sensación de que todo se hacía más deprisa, con más ganas y, por primera vez en mucho tiempo, con posibilidades de ganarse el puesto.
Ayer, todo fue diferente. De entrada, el rival: Un equipo que pensaba más en el intercambio de camisetas al final del partido que en el encuentro en si mismo. Pero también se notó otra velocidad en el Barça. Puede que se debiera al mayor número de entrenamientos, o a la presencia del nuevo jefe. Apostemos por lo segundo, que desde el club ya nos tratarán de convencer de lo primero.Claro está que el hecho de que el nuevo entrenador, Gerardo Martino, estuviera en la grada viendo por primera vez a sus pupilos en directo, debió espolear a más de uno que en Múnich debía pensar que el marrón siempre se lo comen los mismos.
De hecho, la salida del Barça fue fulminante y en seis minutos ya ganaba el equipo blaugrana por 0-2. Alexis fue el encargado de abrir la cuenta goleadora de esta pretemporada y Tello, tras asistencia de Messi marcó el segundo. La Pulga, que marcó el tercero y disparo una vez al palo, hizo literalmente lo que quiso ante los noruegos dando un recital de regates, pases y disparos. En el descanso dejó su puesto al joven camerunés Dongou, la esperanza de la cantera del Barça en el puesto de goleador que marcó dos goles en la segunda parte tras asociarse a la perfección con un Alexis bullicioso. Otro que ve la llegada del nuevo técnico como el inicio de una nueva era.
Sin apenas oposición por parte del rival, el Barcelona dominó todos los tiempos del partido, pero con intensidad, no con la sobradez habitual, se notaba que todos querían dejar su huella en el partido.
En este sentido, destacaron especialmente las arrancadas de Sergi Roberto, que acreditó tener dos zancadas iniciales de las que pueden presumir muy pocos futbolistas; la lucha de Alexis y la mejora notable de Bartra y Montoya respecto al primer partido en Múnich.
Obviamente, cualquier conclusión es aventurada porque el Barça de dentro de tres semanas está en la incubadora. Martino, asistió ayer a las primeras ecografías de un nuevo equipo que a partir de mañana empezará a trabajar junto con la llegada de los internacionales, pero sin querer pecar de optimista, es innegable que la llegada de Martino algo ha movido en el equipo, especialmente en lo que hace referencia a la actitud. Todos sueñan con que parten de cero y el mejor ejemplo de esta situación lo en carna Jonathan Dos Santos, que a pesar de tener un pie y medio en la Real Sociedad, ayer corrió como el que más e incluso marcó un gol.
